¿Qué es más caro… Praga o Budapest?

Cuando llega el momento de programar una nueva escapada para conocer mundo, una de las cuestiones que más nos suelen preocupar es, lógicamente, qué lugares son más caros o más económicos, para poder calcular nuestro presupuesto de vacaciones. Hoy te vamos a aclarar algunas dudas sobre dos de los destinos más turísticos de Europa. Y por ello vamos a plantearte… ¿Qué es más caro… Praga o Budapest?

Seguro que más de una vez has pensado en hacer un recorrido por estas dos bonitas ciudades del este de Europa. Ambas son preciosas, ambas tienen una historia apasionante, con puntos en común, y además ambas tienen muchísimos planes gastronómicos, culturales y de ocio muy divertidos. Pero hay ciertas diferencias entre ellos, y una de estas diferencias es el precio del día a día en ambas ciudades. Vamos a ver en cuál de ellas podrías gastar más o menos dinero.

Praga o Budapest: ¿Qué ciudad es más cara?

Praga y Budapest son dos de las ciudades más turísticas de Europa, sobre todo durante los últimos años en los que se han incorporado al recorrido habitual que suelen tener los visitantes de nuestro país, España. Mientras que alrededor de 1 millón 800000 personas visitaron Praga en el pasado año 2022, para que puedas hacerte una idea, Budapest, por su lado, recibió en 2022 casi cuatro millones de turistas. Esto también se debe a que Praga lleva más tiempo siendo visitado, y Budapest ha vivido un boom, pues hace unos años era un lugar más desconocido.

Budapest es ligeramente más barato que Praga, pero la diferencia no es excesiva. Para responder a la pregunta nos vamos a centrar en 3 aspectos importantes del viaje: Alojamiento, comida y ocio y el gasto en actividades turísticas.

Sea como sea, la realidad es que ambas ciudades tienen algunas características en común. Por ejemplo el clima, que hace que ambas ciudades sean muy frías en los meses de invierno y con una temperatura bastante agradable a partir de la primavera. Cierto es que Praga es una ciudad que suele visitarse mucho en invierno porque tiene un encanto navideño muy carismático, mientras que Budapest es un destino idóneo en otoño y primavera para poder disfrutar de sus termas.

Teniendo en cuenta que las temporadas altas y bajas de ambas ciudades son más o menos las mismas, ahora vamos a contarte… ¿Cuál es más cara, Praga o Budapest, para programar una escapada de unos pocos días?

Noche de Hotel: Budapest es ligeramente más económica.

La elección de alojamiento suele ser uno de los puntos clave para saber si una ciudad es más económica o más cara. Y es el primer punto que te vamos a contar para escoger entre Praga o Budapest. Teniendo como referencia un hotel de tres estrellas, que esté ubicado muy céntrico, algo que siempre escogemos cuando nos escapamos unos días a cualquier ciudad, vamos a decirte los precios de cada una de las ciudades:

• En Praga, mirándolo con una antelación de un mes o dos meses, puedes conseguir un hotel en pleno centro, de tres estrellas y con una habitación para dos personas por un rango de precio que va desde los 80€ a los 110€. Algunos tienen mejores cualidades, como un desayuno tipo buffet incluido o parking, pero en general los precios son bastante similares entre unos y otros hoteles.
• Mientras tanto, en Budapest, encontrar para las mismas fechas de Praga, con un mes de antelación, un hotel en pleno centro, de tres estrellas y con una habitación para dos personas puede costarte entre 60€ y 100€, lo que hace que el alojamiento sea algo más económico. Evidentemente hay de todo, y también puedes escoger hoteles más lujosos o co más pluses en Budapest y que te salga más caro que en Praga, pero, en general, vas a tener más opciones económicas en la capital de Hungría.

Actividades Turísticas: Budapest es más económico.

Cuando se viaja por primera vez a alguna ciudad en la que nunca has estado, lógicamente hay que invertir una parte del presupuesto en visitar las principales atracciones turísticas, monumentos y símbolos históricos. También este es un asunto a tener en cuenta cuando elegimos entre Praga o Budapest según el precio, y es que hay ciertas diferencias entre ambas ciudades:

Podemos hacer una comparativa teniendo en cuenta la tarjeta turística de la ciudad, pues ambas la tienen: la Prague Card y la Budapest Card, respectivamente. Ambas tarjetas sirven para entrar en los principales monumentos turísticos de las dos ciudades, también para viajar en transporte público y para tener algunos descuentos en otras actividades como el paseo en barco por el río Danubio y el río Moldava, en el caso de Praga.

Pues bien, la tarjeta turística de Praga cuesta 50€ por persona para un día, teniendo un descuento los niños y estudiantes y rebajándose a 35€. Mientras tanto, la tarjeta turística de Budapest para un día cuesta 19€ por persona, e incluye también la gran mayoría de los monumentos históricos de la ciudad. Eso sí, no incluye la entrada a los baños Szechenyi, que son los más famosos de la ciudad.

En ambas ciudades puedes realizar actividades muy económicas. Por ejemplo Free Tours. Son tours con guías expertos que te enseñan la ciudad o algunas partes de ella a pie. Al final del Tour le pagas una propina en base a tu satisfacción con la ruta. Lo bueno es que la reserva es gratuita y pagas directamente allí una vez que has hecho la actividad, pero con tu plaza reservada.

Puedes ver el listado completo de los mejores Free Tours en Praga y los mejores Free Tours en Budapest.

Las comidas, las cenas y el ocio en Praga o Budapest: Muy similares

A la hora de escoger un sitio para comer en Praga o en Budapest, la realidad es que los precios son bastante similares. Y es que aunque ambas capitales hayan visto una subida en sus precios, especialmente en las zonas céntricas, debido al turismo, en el caso de los restaurantes tradicionales y los menús, los precios son bastante ajustados, y mucho más baratos que en otras ciudades de Europa como Viena, Londres o París. No será un factor determinante que debieras tener en cuenta a la hora de determinar a donde viajar. No obstante lo desglosamos a continuación.

Por otro lado, la gastronomía tiene muchísimas cosas en común, y por eso vamos a darte algunos datos para que te hagas una idea de cuál es la comparativa real de varios platos en una y otra ciudad:

• El goulash, aunque es más típico en Budapest, también es un plato muy común en la gastronomía checa. Y en ambas ciudades el precio es muy similar: mientras en Budapest lo puedes encontrar por precios que giran entorno a los 6€ y 8€, en Praga también los hay por una media de siete u ocho euros.
• El menú del día también es algo bastante típico en ambas ciudades, sobre todo en los barrios que son menos turísticos y donde comen los habitantes de la ciudad. En el centro de Praga el menú del día puede costar 12€ o 13€, un precio que se asemeja bastante al que tenemos en muchas ciudades de España. En Budapest si es posible encontrar precios más económicos, sobre todo si te alejas de las zonas cerca del Parlamento y los principales monumentos. Es posible encontrar menús del día por unos 10€.
• También en ambas ciudades es muy típico un postre, que sin embargo solemos relacionar más con Praga. Se trata del pastel chimenea, que los checos llaman Trdelnìk y suele costar en los puestos callejeros, especialmente típico durante la Navidad, entre 3€ y 5€. En Budapest suelen ser de tamaño más pequeño, y el precio es también algo menos, pues cuesta entre 2€ y 3€.
• Por último, otro comparador indispensable en las vacaciones es la cerveza, y sobre todo en estas ciudades en las que es una de las bebidas más típicas. Además, las cervezas checas son especialmente famosas en cualquier parte del mundo, mientras que las húngaras están por descubrir, pero también son excelentes. Pues bien, en Budapest puedes encontrarlas desde 1€ hasta los 2,50/3€ en los famosos ruinbars, que son bastante turísticos. Mientras, en Praga la cerveza es realmente económica y pueden costar menos de 1€, y hasta 2€ en cualquier bar del centro.

En definitiva, podemos decir claramente que Budapest sigue siendo hoy una ciudad más económica que Praga, que tiene precios más caros, aunque eso sí, menos que muchas otras grandes ciudades de Europa.